En nuestro país, comprar y vender viviendas con vistas a destinarlas al turismo rural ha pasado a ser una alternativa interesante, tanto para los inversores como para los propietarios de las casas o apartamentos. Eso sí, antes de lanzarse a realizar una operación de este tipo, es necesario entender bien los aspectos legales y fiscales.
Una crucial decisión
Cuando se valora la compra de una vivienda con la intención de destinarla al turismo rural, debemos meditarlo bien. Por este motivo, se hace necesario conocer a fondo las leyes para así evitar problemas legales y asegurarse de que la transacción finalice con éxito.
Invertir en turismo rural está de moda
La actividad del turismo rural consiste en ofertar alojamiento a los turistas en el medio natural y rural. En nuestro país, esta modalidad de turismo ha aumentado mucho en estos últimos años, lo que ha hecho que haya un mayor número de propiedades. Eso sí, si queremos que una propiedad pueda convertirse en un alojamiento apto para el turismo rural, existen una serie de requisitos legales y hay que obtener una serie de licencias.
¿Qué trámites y licencias son necesarios?
Cuando se quiere comprar una propiedad para turismo rural, hay que estar seguro de todas las licencias y permisos que son necesarios. Lo primero que debemos tener en cuenta, como nos dicen los expertos de Trámites Fáciles Santander Abogados & Asesores, es la clase de obra necesaria para acondicionarla. Dependiendo de ello, la obra será mayor o menor y necesitaría diferentes trámites para obtener la licencia de obra en el ayuntamiento de la población a la que pertenezca la propiedad. Este tipo de permisos puede durar desde 15 días a 3 meses. Otro requisito es la obtención de la licencia de apertura de actividad turística, la cual varía dependiendo de la comunidad autónoma en la que se ubique la finca. Este trámite es de los que más se dilatan en el tiempo, llegando a tardar incluso un año, por lo que es importante tener esto en cuenta en la planificación que se realice.
De la misma forma, otro paso que debe realizarse es dar de alta la vivienda en Hacienda. Para ello, un técnico debe valorar la categoría del alojamiento rural. Por último, el alojamiento se tiene que inscribir en el Registro Provincial de Alojamientos Turísticos. Un tema que es vital es saber si hay otras licencias en concreto necesarias dependiendo de la clase de alojamiento que se ofrezca, puesto que no es igual una “casa rural” que una “vivienda turística de alojamiento rural”.
Las administraciones ofrecen una serie de ayudas y de subvenciones para el primero de los casos y escasas para el segundo de ellos. En las casas rurales, es fundamental ser autónomo o proceder a la creación de una sociedad, puesto que se deben emitir facturas y cumplir la totalidad de requerimientos que indique Hacienda al respecto. Para las viviendas turísticas de alojamiento rural, estamos ante una propiedad privada que tiene otra clase de uso, puesto que no es una empresa como tal y no puede beneficiarse de las diferentes ayudas estatales.
¿Cuáles son los requisitos legales para las fincas de uso turístico?
Para las fincas que se destinan al turismo rural, se hace necesario que los propietarios cumplan con las normas y regulaciones que establecen las autoridades. Entre los requisitos se incluyen los aspectos relacionados con la seguridad y accesibilidad del alojamiento, además del cumplimiento de las normas de medioambiente y mantenimiento de la zona en la que está la finca.
- Obtención de licencias y permisos: Algo que hay que tener siempre en cuenta es que el proceso en el que se obtienen las licencias y los permisos puede ser dilatado y necesitar bastante tiempo. Lo mejor que debes hacer es comenzar los trámites con bastante tiempo para así evitar los retrasos en la puesta en marcha del negocio en cuestión. Para ello, el contar con el apoyo y asesoramiento de profesionales que estén especializados en asesoría y trámites legales de licencias ayuda a que se simplifique el proceso y da garantías de que todo esté en regla.
- Implicaciones fiscales y contables: Cuando se adquiere una finca para turismo rural, no debemos olvidar que ello puede tener una serie de implicaciones fiscales importantes. Los propietarios deben tener en cuenta que hay impuestos relacionados con las ganancias patrimoniales, caso del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales o el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, que se le llama también “plusvalía”. Cuando la actividad de turismo rural se haga habitualmente y con fines lucrativos, se tributará como autónomo o sociedad.
- Registro y declaración de ingresos y gastos relacionados: Los propietarios de fincas de turismo rural están obligados también a contar con una contabilidad adecuada y a que se registren los ingresos y gastos relacionados con la actividad turística. Si se mantiene una contabilidad transparente y bien organizada, será más fácil cumplir con las obligaciones fiscales y así se evitarán problemas con Hacienda.
- Normativas y regulaciones específicas: La seguridad de los turistas es algo primordial para las autoridades, ya que los dueños de las fincas que se destinan al turismo rural deberán cumplir con la normativa de seguridad y accesibilidad que se establezca. Entre ellas podemos citar las medidas de prevención contra incendios, sistemas de evacuación claros y garantizar la seguridad de las instalaciones para los visitantes.
- Cumplir los requisitos medioambientales y de mantenimiento: El turismo rural se hace en entornos naturales y rurales, por lo que hay que respetar y proteger el medioambiente y la naturaleza. Los dueños deberán cumplir con las normativas medioambientales y de conservación aplicables. Así se evitan daños al ecosistema y se promueven prácticas sostenibles.
- Recursos y asesoramiento profesional: Como todos estos temas son complejos, hay que elegir bien a los profesionales que nos asesorarán. Los profesionales en la materia guían a los propietarios durante todo el proceso, de tal forma que así se aseguran de cumplir la totalidad de regulaciones y se evitan problemas a nivel fiscal o legal.
Como ves, en nuestro país son muchos los trámites y aspectos que hay que valorar cuando se quiere comprar una vivienda para emprender un negocio de turismo rural, por lo que debes tener muchos aspectos en cuenta.