El ciclismo rural está de moda y como todo lo rural. Si echamos la vista atrás, concretamente a principios del siglo XIX, las personas se quedaban estupefactas cuando veían a ese invento denominado bicicleta, que poca gente iba a suponer cómo iba a cambiar nuestras vidas. Incluso podría todavía llegar a cambiarlas más en el futuro…
En sus comienzos era un juguete que utilizaban los excéntricos que se lo podían permitir, pero desde 1870 pasó a ser considerado un método de transporte, que fue creciendo más y más hasta que pasó a ser un método nuevo de transporte.
La bicicleta pasó a ser ideal para recorrer distancias reducidas sin tener que estar dependiendo de animales y sin más gasto que la propia energía física. Por ello, no fueron pocos los ciclistas que demandaron a las administraciones que los caminos rurales y las calles estuvieran bien acondicionadas para que el viaje en bicicleta no fuera una aventura.
En cuanto utilizar la bici ayudó a que los viajes se hiciesen más rápido, no tardó en ser usada también de manera ociosa, pues se pasó de hacer paseos andando por la ciudad a por el campo en la bicicleta.
Otro vehículo como fue el automóvil llegó a causar una importante revolución, llegando a provocar que la bicicleta se fuera olvidando, pues no podía competir de tú a tú con los coches, salvo en un terreno como es el ecológico, que en aquel entonces ni se valoraba.
La tecnología del automóvil ha liderado el sector del transporte por tierra, donde a partir de ese momento, las bicicletas pasaron a ser una afición o in deporte profesional, lo que propicio que se crearan diferentes competiciones ciclistas en todo el planeta.
En los años ochenta, cuando aumentó por fin la conciencia ecológica en el planeta, muchas ciudades europeas y americanas pasaron a realizar inversiones en infraestructuras para que los ciudadanos pudieran ir en sus bicicletas.
Actualmente, el gran número de coches y de medios transporte colapsan tanto las vías que el transporte en bicicleta era bastante más rápido que utilizar esta otra clase de sistemas. Progresivamente, tanto la conciencia como el amor por las bicicletas volvió y con el gran interés que existe por ejercicio, se le ha dado a la bicicleta un uso donde se mezclan el ocio, el deporte y la confianza. Todo esto tuvo como consecuencia que se crearan las rutas ciclistas.
Las rutas por lo general se hacen en ambientes campestres, de montaña, aunque existen algunas que incluyen visitas a ciudades de gran tamaño como oferta a nivel turístico, donde el objetivo que tienen las rutas suele ser por lo general de entretenimiento y ocio, algo a destacar en una nación con tantas zonas rurales y accidentes a nivel geográfico como es nuestro país.
La fiebre por las bicicletas
En estos tiempos que vivimos, una de las grandes beneficiadas han sido las bicicletas, pues han visto como incluso en muchos meses del 2020 era imposible encontrar modelos nuevos, a la vista de tanta demanda y la menor producción de muchos modelos que se fabricaban en China.
Podríamos decir que fue la segunda gran explosión, pues a principios de la década de los 90 también mucha gente se compró bicicletas de montaña. Eso sí, ahora el apartado técnico y el equipamiento que llevan los usuarios es mucho más importante.
La gente se lo toma todo más en serio, tanto para hacer deporte como incluso para dar un paseo. Además, también podemos hablar de las bicicletas eléctricas, que son esa ayuda extra que permite poder hacer rutas más duras para todos aquellos a los que el físico no les responde o que simplemente desean una ayudita extra.
La empresa profesional de rutas turísticas multiaventura ecoactivaturismo.es creen que esas rutas con bicicleta eléctrica ayudan a que muchas personas que de otra forma no se plo plantearían ahora lo hacen con más facilidad, pues saben que la bicicleta les va a poder ayudar en cualquier momento de debilidad, o simplemente cuando no les apetezca estar pedaleando más.
Como podemos ver, el ciclismo se ha adaptado a los usuarios y no al revés, una muestra de lo que también ocurren en otras prácticas deportivas, que saben de la importancia que tiene para los usuarios el disponer de buenas rutas, un apartado donde las administraciones tienen mucho que decir y donde los esfuerzos por un óptimo mantenimiento deben ser reales.
Deseamos que este artículo valga para que aumente la concienciación en este sentido, pues al final todos los usuarios queremos pasar buenos momentos en la bicicleta en pleno contacto con la naturaleza.